este adiós no maquilla un 'hasta luego', este nunca no esconde un 'ojalá', esta ceniza no juega con fuego, este ciego no mira para atrás. a este ruido tan huérfano de padre, no voy a permitirle que taladre un corazón prohibido de latir, este pez ya no muere por tu boca, este loco se va con otra loca, estos ojos ya no lloran más por ti.
esta sala de espera sin esperanza, estas pilas de un timbre que se secó. este helado de fresa de la venganza, esta empresa de mudanzas con los muebles del amor. esta campana muere en el campanario, esta mitad partida por la mitad, estos besos de judas. estas ganas de nada, menos de ti. este huracán sin ojo que lo gobierne, este jueves, este viernes, y el miércoles que vendrá. no abusés de mi inspiración, no acuses a mi corazón. por las arrugas de mi voz, se filtra la desolación de saber que estos son los últimos versos que te escribo. para decir 'adiós' a los dos nos sobran los motivos.
este museo de arcángeles disecados, este perro de andaluz sin domesticar. esta lágrima de mujer de las cavernas, que poco rato dura la vida eterna por el túnel de tus piernas entre córdoba y maipú. estos labios que saben a despedida, a vinagre en las heridas, a pañuelo de estación. estos dedos que sueñan que te desnudan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario